El stand estará ubicado en el Pabellón 7 y ocupará una superficie de 373 metros cuadrados en planta baja, lo que supone 62 metros más que el año pasado. Habrá dos zonas diferenciadas, una abierta al público con mostradores para que los ayuntamientos, las empresas y el Instituto de Turismo distribuyan folletos y material promocional, y una zona profesional equipada con mesas de reuniones y cafetería.

Nuestra ciudad, según fuentes de la concejalía de Turismo, dará a conocer, en su oferta de turismo de interior, sus encantos paisajísticos y naturales, así como los culturales y de ocio, (entre otros se promocionarán nuestros museos, rutas de senderismo, Mercadillo de los Frailes, Almadenes, nuestros alojamientos rurales, etc.). También hacemos un guiño, anuncian desde turismo, a la floración, ya que fiel a su cita, cada año, nuestro municipio se tiñe de mantos blancos y rosáceos, configurando un paisaje espectacular ideal para acercarse en coche, a pie o en bicicleta y sentir de cerca el estallido de color que desprenden nuestras huertas y campos. Se promocionarán nuevas rutas creadas al efecto para que nuestros visitantes puedan disfrutar de un espectáculo sin igual para los sentidos, donde los árboles frutales, especialmente melocotoneros, bañan de color el paisaje huertano.

La Comunidad Autónoma promocionará en Fitur el clima de la Región y Cieza es un enclave privilegiado, ya que por su situación geográfica en la vega alta del río Segura, podemos ofrecer al visitante múltiples posibilidades de disfrutar en contacto con la naturaleza de su tiempo libre. Senderismo, escalada, mountain bike, son actividades que dadas las excelentes condiciones naturales del municipio, hacen del mismo un escenario ideal para el desarrollo y práctica de estas modalidades de turismo activo, pero sin duda, es el río Segura el que adquiere un especial protagonismo, ya que atraviesa todo el municipio.

Es un río de fuerte corrientes y aguas limpias que confieren el escenario ideal para los amantes de la naturaleza y la aventura, ya que su navegabilidad permite descender sus aguas en piragua o en balsas de rafting. El recorrido, salpicado en ambas márgenes de tramos de bosque de ribera y cañaverales, ofrede parajes de gran belleza y rincones con encanto.