“Los restos de poda se deben depositar en contenedores exclusivos para este uso y/o deben ser triturados”. Recuerdan que está totalmente prohibida la quema de los mismos y que sólo está permitido quemar por causa de plaga vegetal o riesgo fitosanitario, algo que deberá acreditarse mediante certificado expedido por un técnico agrícola, comunicándolo al Servicio de Calidad Vegetal de la Dirección General de Agricultura de la Comunidad Autónoma.

Además, los datos que deberán aportarse son nombre y apellidos, DNI, teléfono de contacto, municipio, polígono y parcela catastral, día o días y la hora que tendría lugar la quema en los días y horario permitidos: de lunes a jueves de 11 a 14h, y el primer y tercer sábado de cada mes.

Asimismo, cuando la finca esté situada a menos de 400 metros de terreno forestal, deberá comunicarse igualmente a prevención.incendiosforestales@carm.es, pero en este caso es preceptivo un informe favorable del Centro de Coordinación Forestal para poder proceder a la quema.

“Afortunadamente en nuestro municipio, con el apoyo de nuestra tecnificada agricultura, los restos de poda son triturados en casi su totalidad. No obstante, en el ámbito urbano (periurbano) al estar totalmente prohibidas, hemos procedido a la colocación de estos contendedores exclusivamente para restos de poda, en la zona de la huerta baja, desde la Presa al Argaz. Recordemos que en este entorno contamos con cinco colegios, un centro de salud y el hospital”.

Recuerdan las citadas fuentes que “las competencias corresponden a la Comunidad Autónoma, por lo que es el Seprona el que debe vigilar y sancionar en el conjunto del término municipal en el caso de no cumplir estas normas. La Policía Local por su parte, vigilará que no se produzcan quemas en el ámbito urbano (periurbano) y que se utilicen estos contenedores correctamente”.