Tras meses de desidia por parte de la concejalía competente y las molestias sufridas por los vecinos de la zona, aparición de roedores y mosquitos, por fin se ha procedido al desbroce de la parcela que ocupa la piscina climatizada en el Camino de Alicante de nuestra ciudad. Para López “no basta con las labores realzadas hasta el momento, sino que es necesario el mantenimiento continuado de una instalación pagada con los impuestos de los ciudadanos y que presenta un aspecto lamentable por el abandono inexplicable de la misma”