Si consiguen ustedes entender algo, enhorabuena, porque lo que es yo, quedéme a cuadros y olvidéme. Y luego dicen de mí algunos…

“¡Hola amigos! Ahora estamos a viernes y tanto no aquende (¿) me tenéis escaso faltar a la cita. Aprovechar las asueto que os toque (suerte quien las haya tenido…¿se referirá a vacaciones?) que hoy mismo viene septiembre, osea la naturalidad. Este artículo está enfocado fundamentalmente a las páginas webs que ofrecen hostings, (algo así como alojamientos u hospedaje para páginas webs, aclaro yo…) mas aun se puede extrapolar en cualquiera plana, actualmente que el doctrina de afiliados es harto amplio. (Bueno…) Cuando abres una cuartilla web o tienda online enfocada a los alojamientos web, es de lógica que tu determinación sea ganar dinero y a poder ser vivir de los ingresos que genera las ventas realizadas desde tu holandesa. Muchos de vosotros ahora sabréis que este concavidad en exacto es conveniente competitivo y es mucho difícil destacar de aquellas páginas que hoy están bien posicionadas. (Mucho…mucho difícil todo) Teniendo en cuenta este factor, (¡Ah!) vamos a tener que destacar del resto de páginas que ofrecen lo mismo. Una de las opción que a uno se le puede pasar por la cabeza, es ascender todo modelo de hostings, desprovisto importar si son de calidad o no (Claro, claro…ya lo voy viendo…). De hecho, existen muchos hostings gratuitos que podrían resultar inclusive tentadores promocionarlos, actualmente que cierto de ellos te pagan inclusive comisiones. Es entonces, en el momento que uno se cuestión si se puede marcar la diferencia del resto de competencia ofreciendo todos los productos que te puedas imaginar relacionados con los hostings.

Si quieres marcar la diferencia tienes que brindar los mejores hostings Si tu deseo era dedicar todos los productos existentes concerniente a los alojamientos web, estás mucho desacertado (Mucho, mucho desacertado tú). Puedes caer en tu propia trampa y tener graves repercusiones a modo por ejemplo: 1) Mala fama online No todos los hostings son de calidad. Esto implica, a que muchos clientes tuyos en el momento que contraten ese hosting en cuestión se acordará de ti y puede ponerte a parir en las redes sociales (y hasta practicarte una cesárea sin “anastasia”) ente que no te interesa en absoluto. 2) Pérdida de tráfico de visitas Si te has creado una mala imagen por convidar productos de dudosa calidad, no esperes agigantar tu tráfico de visitas. Es más, puedes llegar a la desindexación (Eso no, eso ya empieza a ser grave). Hoy te preguntarás por qué y te voy a responder (¡Ah!). Si muchos clientes te toman tanto spam web te denunciarán y la derivación es penalización de Google. No suele pasar estas cosas, pero la dilema está (Ahí está la dilema, sí…). 3) Tu nombre atención manchado para futuros proyectos Aunque decidas cambiar de proyecto, recuerda que tu nombre actualmente a sonado (la h que te has comido no suena, es muda) en las redes sociales. Esto significa, que muchas personas dirán pestes de toda ente que quieres hacer en internet, y verdaderamente es una pena (Sí…). 4) No esperes ganar mucho dinero En el mejor de los casos, supongamos que ninguna persona se queja, no esperes obtener ganancias increíbles, hoy que los hostings de baja calidad suelen dar comisiones de hilaridad (¡Qué bien, qué risa, págame!). Por ejemplo, hay hostings gratuitos que te pagan dinero, pero si vendes unos productos determinados, y si no es así no ganas nadie. Hablando claro (¡por fin!), estarías invirtiendo tu duración desprovisto ganar dinero ¿Eso interesa? (Evidentemente…NO). Ofrecer los mejores productos menos aún es la solución de tus problemas Ya lo sé, me estarás diciendo… Si ofreciendo los mejores productos no es suficiente ¿Qué tengo que hacer? Suena pellizco descuidado esto que os acabo de decir, pero veréis hoy mismo que tiene sentido. (Sí, pero el doloroso pellizco que me has dado, así, al descuido y como quien no quiere la cosa, no hay quien me lo quite) Ofrecer productos de calidad sin un aclaración no tiene conversiones (ni al Cristianismo ni al Budismo, ni al Islamismo). Básicamente, porque no estamos aportando valor informativa a nuestro consumidor y por tanto no tiene un finalidad candente en comprarte a ti. La falta de aviso crea inconstancia y por lo tanto hay bajón de ventas. (Se entiende, ¿verdad?) Si queremos vender, vamos a tener que entregar el mejor consejo posible en todos los ámbitos del producto en cuestión, que en este incidente (¿) son los hostings. Uno de los ejemplos más claros que te puedo dar es esta misma hoja (Pues claro, hombre, claro…). Si miras detenidamente todos sus apartados (top hosting web), podrás ver toda la asesoría que necesitas e inclusive tiene servicio de urgencias médicas. (¡Joder, eso lo arregla todo!¡Haberlo dicho antes!) Y esto es todo por ahora. Nos vemos la hebdómada (¿mande?...) que viene y cualquiera duda hoy sabéis, explicar”.

Contrastivamente, deléitense ahora con un breve fragmento del final del “Quijote”… …

Para mí sola nació don Quijote, y yo para él; él supo obrar y yo escribir; solos los dos somos para en uno, a despecho y pesar del escritor fingido y tordesillesco que se atrevió, o se ha de atrever, a escribir con pluma de avestruz grosera y mal deliñada las hazañas de mi valeroso caballero, porque no es carga de sus hombros ni asunto de su resfriado ingenio; a quien advertirás, si acaso llegas a conocerle, que deje reposar en la sepultura los cansados y ya podridos huesos de don Quijote, y no le quiera llevar, contra todos los fueros de la muerte, a Castilla la Vieja, haciéndole salir de la fuesa donde real y verdaderamente yace tendido de largo a largo, imposibilitado de hacer tercera jornada y salida nueva; que, para hacer burla de tantas como hicieron tantos andantes caballeros, bastan las dos que él hizo, tan a gusto y beneplácito de las gentes a cuya noticia llegaron, así en éstos como en los estraños reinos». Y con esto cumplirás con tu cristiana profesión, aconsejando bien a quien mal te quiere, y yo quedaré satisfecho y ufano de haber sido el primero que gozó el fruto de sus escritos enteramente, como deseaba, pues no ha sido otro mi deseo que poner en aborrecimiento de los hombres las fingidas y disparatadas historias de los libros de caballerías, que, por las de mi verdadero don Quijote, van ya tropezando, y han de caer del todo, sin duda alguna. Vale.

Sí, don Miguel, vale, valió y valdrá. Al menos para unos cuantos rebeldes que nos negamos a pasar por el tamiz igualador-entontecedor, por la trituradora de neuronas en que se está convirtiendo nuestra sociedad.