Unos días donde las “imaginarias” barreras de la edad se diluyen y mayores y pequeños juegan, trabajan, construyen y disfrutan juntos.
La concejal delegada de Personas Mayores, Cristina García-Vaso, entregaba en la clausura de este proyecto, un diploma a cada uno de los niños participantes, y a los mayores que han participado como voluntarios, un regalo de agradecimiento por su labor enriquecedora y altruista.