Este encuentro de trabajo sirvió para presentar la labor que realiza esta organización no gubernamental en materia de inmigración, formación para el empleo, juventud, infancia y apoyo a la escuela pública. Fernández Tendero se centró tanto en la trayectoria nacional como en la labor concreta que realiza esta organización no gubernamental en la Región de Murcia, donde lleva muchos años desarrollando proyectos de inmigración, formación para el empleo, juventud, infancia y apoyo a la escuela pública, entre otras tareas.

La Liga Española de la Educación y la Cultura Popular es una organización no gubernamental, de carácter independiente y laica, creada en 1986 para servir objetivos comunes de interés general. En la actualidad está formada por una red de personas voluntarias y profesionales que prestan servicios sociales, educativos, asistenciales, compensatorios o de tiempo libre para promocionar una educación cívica de jóvenes y adultos basada en los valores democráticos, derechos humanos y la solidaridad social.

Se trata de una organización vertebrada por el principio de la laicidad, entendida claramente como pacto de convivencia y tolerancia entre ciudadanos y ciudadanas solidarias, libres e iguales, para que puedan ejercer plenamente su ciudadanía y contribuir así a establecer una sociedad más justa, libre y solidaria. A través de programas de intervención socioeducativa y sociocultural, en sectores prioritarios como la infancia, la familia, la juventud, la inmigración, la escuela pública, la educación para la ciudadanía, la cooperación internacional, la Liga llega cada año de manera directa e indirecta a más de doscientas mil personas que se benefician de estos servicios.

Así la educación, solidaridad y ciudadanía sirven de guía a las acciones dirigidas prioritariamente a colectivos en riesgo de exclusión social que viven tanto en zonas rurales como urbanas donde se coopera para favorecer el desarrollo local. En las casas de niños y escuelas infantiles suponen ya 23 centros abiertos y funcionando activamente en más de 12 localidades donde más de un millar de niños y niñas de 0 a 3 años acuden a ellos.

La mediación educativa se extiende a más de 4.000 familias con dificultades relacionales o de convivencia. También dispone de puntos de encuentro y espacios facilitadores de las relaciones familiares en los que se llevan a cabo proyectos formativos y de animación socio-comunitaria, campañas de sensibilización o la creación de espacios interculturales donde se fomentan la convivencia a través de las aulas abiertas interculturales, aulas de alfabetización y centros de apoyo a inmigrantes.