Ya en nuestra ciudad de Cieza son ya históricos los belenes tanto de iglesias, como de cofradías como los Dormis, o asociaciones, el propio ayuntamiento de Cieza, o particulares que a lo largo de nuestra historia nos han deleitado con la instalación de los tradicionales belenes.

Los belenes tienen por ende que formar parte de la memoria sentimental de todo un pueblo, de las mismas familias, de los colegios, en rededor a ellos se ha cantado, rezado, se recuerda a los que se han marchado al belén celestial de la gloria de Dios, a esas sillas vacías que siempre en todos los hogares por estas fiestas tenemos todos, se ha recordado en torno al belén a los que ya no están. Los belenes es lo nuestro, forman parte ya de la memoria cultural de España, de Murcia y de Cieza.

El preparar un belén es muestra de un amor infinito, es una auténtica catequesis religiosa y cultural, costumbrista si se me permite el término, nos hace niños a todos/as, nos evocan tiempos ya pasados, nos llena de nostalgia y cariño hacia los demás, nos hace más empáticos, nos mete en un mundo mágico que nos hace llenarnos de ilusión y capaces de sentirnos más humanos buscando la sencillez de las cosas, de la vida, dando vida a un belén nos damos vida a nosotros mismos, ser más humanos, buscar en lo sencillo al mismo Dios, que siendo Dios se hizo hombre para que el hombre sea Dios. El belén nos da lo más grande que todo ser tiene dentro: La solidaridad y el amor.

No perdamos jamás la hermosa costumbre en nuestras casas de hacer el belén, de rezar ante él, de cantar, de ver a un niño indefenso que viene para darnos la vida. Es una costumbre cristiana, sentimental, de recuerdos y vivencias de tiempos pretéritos, de la niñez, una costumbre española, murciana, ciezana de todos los tiempos, actuales también y más este año terrible que va a acabar dentro de unos días.

En Cieza son ya siglos de poner el belén. Nos remontamos al belén que se hacía en la Basílica de la Asunción de estilo salzillesco, de figuras de barro, y se instalaba en el altar mayor de dicha iglesia basilical ciezana que con el paso de los años se dejó de hacer. O los belenes familiares ciezanos de costumbres belenísticas tales como el belén de la familia Molina Rodriguez, (Los Giges) en la calle Cartas de Cieza, o en la misma calle Cartas el que ponía también la familia Ruíz Iglesias, D.Pedro Ruíz Yarza, padre de Encarna Ruíz Iglesias, camarera de la imagen de Nº. Padre Jesús, de estilo también salzillesco. Recuerda que la "tita Encarna", como la llamaba yo, se llevó ese belén a Madrid donde ella vivía y siempre decía cuando hablaba con ella por teléfono que en Madrid era admirado como "una joya", e iban a verlo muchos vecinos y amistades en su casa en la capital de España, siempre lo instalaba en estos días.

El belén de la familia de Moxó Perona, en la calle Cadenas de Cieza también era una verdadera obra de arte y nunca faltaba a su cita con los ciezanos por estos días. El belén de "Chiquito", que vivía frente al Colegio de la Madre del Divino Pastor en el Camino de Madrid también era muy visitado y querido por los ciezanos. Y otros muchos belenes que se hacían por los hogares de nuestra ciudad que causaban la admiración de todo el que los visitaba.

Ya en los últimos tiempos algunas familias de las ya mencionadas dejaron de hacer su belén o el caso del belén de la "tita Encarna" que se instalaba en Madrid, pero han tomado el relevo otros tales como la propia Basílica de la Asunción que lo recuperó hace años y todavía se instala, o el belén monumental de los Dormis, todo un clásico ya en estas fechas, o el belén de Juan Villalba y su familia que instalan en su casa uno de admirable esfuerzo y maestría. El belen de la familia Lucas García, o el hermoso belén del colegio José Marín (El Fatego) con figuras de Olot de tamaño grande y de gran valor. El belén en el Convento de San Joaquín y San Pascual, el belén que se instala en el Convento de las Clarisas de Cieza que es móvil, con gran trabajo y dedicación.

Pero hay familias que en sus casas ponen todos los años su belén y ante él se cena y se vive la Nochebuena, la fiesta de amor, de la familia, de la gran entrega de todo un Dios que se hace un pobre niño indefenso, para que tú seas como Dios, y te comportes como tal.

El propio ayuntamiento de Cieza desde los años 60 del pasado siglo XX monta su belén, empezando aquel trabajo y en aquellos años el maestro Manuel Juan Carrillo con estudiantes del entonces Instituto Laboral y empleados del propio ayuntamiento de Cieza montaban el belén municipal en los jardines junto al entonces juzgado en la Esquina del Convento, luego se instalaría en la Plaza de España. Fué también en los ayuntamientos democráticos cuando se le dio un impulso importante, ya que el concejal de cultura de entonces D. Jesús Bernal logró adquirir figuras a José Griñán e instalar unas veces en las escalinatas del Convento o encima de la fuente que se encontraba en el centro de la Esquina del Convento hermosos belenes realizados por todos los pintores y artistas ciezanos entre los que se encontraban Pedro Avellaneda, Cayetano Toledo Puche, Carmen Carrillo, Pascual Fernández Molina, Miguel Yepes ..., logrando una escenografía especial y muy lograda.

Ya en el año 1.993 gracias a la entonces concejala de cultura Dª. Beatríz Sarrión se adquieren más figuras y así enriquecer más y potenciar esta hermosa tradición belenística en Cieza y que no se perdiera. Ya en puertas del siglo XXI, en el año 2000, principio y fin de un siglo y de un milenio, se instala el belén municipal en el edificio más antiguo de la ciudad de Cieza, en la Ermita de San Bartolomé, Patrón de Cieza y la huerta. Fue el 23 de diciembre del año 2000, cuando se inaugura el belén municipal en este edificio, hace ahora justo veinte años. Edificio emblemático y singular y tan ciezano, del siglo XV, y reestructurado en el siglo XVIII, en el 1.714 cuando se le añade el piso superior llamado "EL CONJURATORIO", lugar donde se bendecía el campo ciezano y su huerta contra las nubes tempestuosas cada 25 de abril de cada año. Este conjuratorio junto al de la torre de la S.I.Catedral de Murcia y el de el Santuario de la Stma. y Vera Cruz de Caravaca son los tres que se conservan en todo el sureste español.

También como parte de la historia de Cieza puedo decir que el día 9 de diciembre del 1.541, el Emperador Carlos I de España y V de Alemania pernoctó en la colindante casa de la Encomienda y rezó en la ermita ante la imagen del Santo Patrono de Cieza.

El belén monumental de aquel año 2000 rindió un homenaje a los monumentos históricos de Cieza: Basílica de la Asunción, Convento de San Joaquín, Plaza de Abastos o la Ermita de San Bartolomé, maquetas hechas por el ya fallecido D. Manuel Talón Martínez, con gran maestría y trabajo, dando así contexto a las principales escenas de estas fiestas navideñas. Fue inaugurado por el entonces alcalde de Cieza el Dr. D. Francisco Martínez Rojas, estando presente la Corporación Municipal en Pleno y una plaza de San Bartolomé abarrotada de gente deseosa de ver el belén en este sitio tan entrañable. En este mismo acto se daba reapertura a la Ermita del Patrono de Cieza que acababa de ser restaurada gracias al empeño de su cofradía y el patrocinio del propio ayuntamiento ciezano que no escatimó esfuerzo en hacer realidad aquella tan esperada y merecida restauración.

Merecido reconocimiento el de Cultura con los belenes. Merecido, ganado durante siglos. El poner el belén en tu casa es lo nuestro, es lo ciezano, lo murciano, lo español, forma parte de nuestra cultura, de nuestro ser, de nuestras tradiciones, de nuestra manera cristiana de ver esa noche donde el Niño Dios junto a la Virgen y San José están en un pobre portal. Portal que aquí es Cieza, que es tu corazón, que es tu vida.

Que sepamos vivir esta Navidad de una manera especial, cristiana, más humana, más con el terrible año que hemos y estamos sufriendo, que recemos en torno al belén por los que han muerto este año víctimas de esta pandemia, que recemos por nosotros para que Jesús Niño nos llene de amor, empatía con los demás, por lo menos de ser algo más humanos.

Que recordemos a los miembros de nuestras familias que ya no están y nos miran desde el hermoso balcón del Cielo, que sepamos contemplar lo sencillo de la vida y lo difícil que a veces la hacemos. Pido a Jesús Niño que nos bendiga a todos/as, a nuestro Cieza, a los que lo están pasando fatal, que demos amor, paz, y que Él nos ayude y nos bendiga, nos dé consuelo, esperanza, que un futuro mejor es posible y que aprendamos a ser mas hermanos, mas y mejor cristianos y mejor ciezanos, que nuestro Santo Cristo desde lo alto de su ermita nos dé una bendición especial, de paz, esperanza y confianza. Que Dios os bendiga a todos/as, no nos separemos de ÉL jamás!!.

Muchos muchos años hace

que Cristo nació en Belén,

y en mi Cieza por diciembre

nace de nuevo otra vez.

¡Hacemos unos belenes,

poniendo la huerta en él!

con el río, la Atalaya

y palmeras de papel.

Y desde el Puente Hierro,

al anochecer,

los Reyes Magos en enero

entrarán a Cieza por el.

En los hogares ciezanos,

el Niño nace también,

esperando feriarse

el día de San Bartolomé.