La exposición fue inaugurada el pasado viernes en el Museo de Siyâsa por el Alcalde de Cieza, Antonio Tamayo, junto con la edil de Museos y Patrimonio Histórico, María Antonia Giménez y el director del museo, Joaquín Salmerón. En el acto también intervinieron el artista, Zacarías Cerezo, y Miguel Olmos, comisario de arte que ha colaborado en la puesta a punto de la muestra. Las acuarelas, de gran tamaño, han ido componiendo, una a una, el “bosque personal” del artista, como indicó durante su intervención en el momento de la apertura de la muestra.
Joaquín Salmerón apuntó que esta exposición, fruto de los dos últimos años de trabajo de Cerezo, componen “lo mejor de su arte”. Calificación que reiteró Olmos: “se trata de una obra en la que el artista ha puesto una mayor suavidad, un trazo más largo que lleva al arte a lo más profundo del corazón de las personas”.
Las pinturas, una veintena de acuarelas, reflejan entornos naturales que evocan la paz y el sosiego de los verdes perfectos, pero también la dureza de la roca y la gustosa tristeza de la madera. Son paisajes que desentrañan la intensa unión del artista con el espectáculo de la naturaleza con una belleza interior que va más allá del trazo y de la propia obra.
Cerezo explicó que la morfología de los troncos y las copas “permite desarrollar muy bien las luces y los espacios” en la pintura. Hecho que hace que el proceso de creación sea un encuentro con el disfrute personal e íntimo del artista.