El concejal de Transparencia, Miguel Gual, ha sido invitado por la alcaldesa de Madrid a participar en las jornadas que el Ayuntamiento ha organizado como espacio de experiencias e iniciativas y para estudiar las posibilidades reales y obstáculos para lograr la gestión pública del agua. Han estado presentes en el Encuentro de Ciudades por el Agua Pública, que se ha organizado conjuntamente con la Red Agua Pública (RAP), decenas de plataformas, organizaciones sociales, ambientales, sindicales y políticas del Estado español que luchan por la defensa de la gestión pública, sin ánimo de lucro, transparente y participativa de los servicios de abastecimiento y saneamiento, que han reunido a expertos nacionales e internacionales, representantes de administraciones locales y supramunicipales, operadores públicos y movimientos sociales defensores de la gestión pública del agua.
También han estado presentes las alcaldesas y alcaldes de las principales ciudades de España que apoyan la gestión pública, democrática y transparente del agua, así como los Alcaldes del cambio como Ada Colau (Barcelona), Joan Ribó (Valencia), Pedro Santisteve (Zaragoza), María Isabel Ambrosio (Córdoba), Óscar Puente (Valladolid), Xulio Ferreiro (A Coruña), Jordi Ballart (Terrassa), Martiño Noriega (Santiago de Compostela) y Guillermo Hita, alcalde de Arganda del Rey y presidente de la Federación de Municipios de Madrid.
La representación murciana estuvo encabezada por la diputada regional de Podemos, María Giménez, que clausuró el encuentro, además de representantes de todas los municipios donde Podemos tiene candidaturas afines, como es el caso de Pilar Marcos (Cartagena), Pedro Jesús Martínez (Molina), Luis Alberto Bermejo (Murcia) y Miguel Alzamora, conocido profesor universitario experto en agua publica.
Miguel Gual ha destacado la importancia del evento para estudiar ciudades como París o Valladolid que ya han iniciado el camino para que no se comercie con el agua y sea considerado como bien público y en especial el ciudadano pague justo el coste, concluyendo que “las jornadas han demostrado con pruebas reales que la gestión pública es mucho más eficiente, real, transparente y sobre todo abarata los costes hasta límites insospechados”
